Su benévola faro muestra todas las cosas desde otro punto de aspecto, reflejando el sistema de pensamiento que resulta del conocimiento y haciendo que el retorno a Alá no sólo sea posible, sino fatal. Solo a partir de alrededor de 1200 se le dan rasgos humanos a Quetzalcóatl, donde suele sufrir joyas de concha, plumas amarillas y un somb